Memoria Abierta, 2012
La irrupción en las audiencias orales y públicas de los relatos de violencia sexual en los centros clandestinos de detención y la apertura judicial a reconocerla como un delito autónomo, tan sistemático como las torturas, pusieron un tema silenciado durante 35 años en la agenda pública. En este trabajo se analizan más de 60 testimonios de mujeres que forman parte del Archivo Oral de Memoria Abierta. Se trata de relatos que, de modos diversos, denuncian y reflexionan sobre esa violencia, sus manifestaciones, impactos subjetivos y ecos en el presente.
El silencio acerca de este tema, las dificultades en la escucha, los lugares, momentos e interlocutores con quienes estas mujeres han querido o podido referirse a esas violencias y a sus secuelas, son algunos de los tópicos que se desarrollan. Una de las cuestiones más notables es la necesidad de las sobrevivientes de moverse de la posición de víctimas para hacer foco en sus relatos de resistencia, en aquellos pequeños gestos y solidaridades, para seguir sintiéndose personas. Y nadie quería saber recoge y resalta ese conjunto de estrategias de resistencia, individuales y colectivas, y de solidaridades que se suscitaron, dentro de los limitados márgenes de acción del cautiverio, frente a la amenaza de la violencia sexual.