Mujer joven, de 20 años, que ha vivido situaciones de violencia desde niña, comenzando por violencia intrafamiliar. A los 14 años fue víctima de una violación sexual por parte de tres hombres al volver a su casa desde el colegio. Este hecho tuvo graves consecuencias en su vida, entró en depresión y comenzó a auto-lesionarse. Ha tenido varias relaciones de pareja en las que se han repetido los esquemas de maltrato y agresión, como elementos constitutivos de su vida afectiva y emocional.
En su primera relación fue víctima de agresiones físicas, psicológicas y sexuales. En su segunda relación fue obligada a abortar, bajo engaños, sometida sin su consentimiento a una inyección que le aplicó un farmacéutico amigo de su pareja. Este aborto forzado le provocó episodios de rabia, resentimiento, dolor y depresión, pérdida de autoestima, inició un consumo diario de alcohol y un dejamiento total de sí misma. Después de un año de estar sola, comenzó una nueva relación con quien sería el padre de su hijo; al saber que estaba embarazada, él se negó a asumir la paternidad y la abandonó. Más tarde inició la relación con su actual pareja, con quien también ha vivido episodios de maltrato físico, verbal y psicológico. Para ella, el mayor y más violento de todos los maltratos fue cuando fue obligada a abortar en contra de su voluntad.